Reunificar deudas no sale gratis. Implica varios gastos que debes tener en mente antes de decidirte por esta solución. Por ello, te recomendamos que valores bien tu situación financiera. El primero de ellos es el nuevo tipo de interés que se te aplicará, aunque el plazo de amortización de esa cantidad agrupada te será ampliado. Además, tienes que pagar las comisiones correspondientes por cancelar tus préstamos de forma anticipada.
Otro de los costes que aparecen en esta fórmula es el que se deriva de formalizar la apertura de tu nueva hipoteca. Ya que este procedimiento es habitual a la hora de reunificar préstamos, debes afrontar todos los gastos que conlleva: por la tasación del inmueble, por el registro de la propiedad, por los honorarios del notario y por el Impuesto de Actos Jurídicos Documentados.
Junto a todo esto, igualmente aparecen esos pagos de otros impuestos vinculados al proceso o las tarifas que debes abonar a la agencia mediadora entre ambas partes. Si optas por esta figura intermediaria, supone un gasto más. En cambio, si la reunificación la gestiona tu banco, este no suele cobrar comisión por ello.
Gracias a esta alternativa tan ventajosa puedes incluso pagar menos de la mitad de lo que ya estabas pagando por la suma de todos tus préstamos. Por eso, esta ayuda para reunificar deudas es interesante, aunque debes saber también que estarás endeudado durante más años. Este podría ser otro coste más añadido. Por ello, te aconsejamos valorar y pensar bien si te va a resultar rentable.
El hecho de que debas pagar menor cantidad cada mes te puede dar un margen para el ahorro, algo importante. O, si pronosticas que durante un tramo temporal considerable vas a tener menores ingresos, quizás te resulte beneficioso elegir esta opción de agrupar préstamos para pagar deudas. Aquí la clave está también en analizar tu nivel de endeudamiento, así como tu garantía de tener trabajo para ir abonando la cuota mensual.
En conclusión, esto debes saber acerca de la reunificación de deudas respecto a los gastos que conlleva. Es ventajosa, pero depende de tu situación financiera.