A la hora de hablar de préstamos debemos destacar un concepto fundamental, que no es otro que el TAE, cuyas siglas significan Tasa Anual Equivalente o Efectiva. Se trata de un indicador que surge como resultado de una fórmula matemática donde se engloban aspectos como el tipo de interés nominal, las comisiones y plazo de la operación.
Por tanto, es un indicador que está presente en la contratación de servicios financieros de ahorro, préstamos hipotecarios y créditos personales. Es esencial que tengamos en cuenta todos estos baremos para saber si podemos optar a un crédito y, sobre todo, para tener la certeza de que lo podemos devolver. Este indicador quedaría explicado de acuerdo con los diferentes servicios financieros de la siguiente manera:
Como decimos, este indicador es importante que lo tengas en cuenta cuando vayas a pedir un préstamo porque podrás calcular los intereses que vas a tener que pagar y los plazos para abonar dichas cantidades.
Por tanto, recomendamos que, especialmente a la hora de pedir grandes préstamos como el de una hipoteca, te asesores con un especialista bancario que te indique en los aspectos en los que puedas tener duda. Ponemos el foco en este punto porque, en caso de no poder devolver el préstamo a tiempo, tendríamos que pagar penalizaciones y, en el peor de los casos, que nos embargaran la vivienda.
En conclusión, el TAE nos indica las condiciones que podemos tener a la hora de pedir un préstamo, de ahí que te recomendemos tenerlo presente para saber que puedes devolver la cantidad prestada.