Economía doméstica en tiempos de coronavirus

Continuar (sin compromiso)
El impacto del coronavirus lo ha cambiado todo. Durante siglos las pandemias han formado parte de nuestra historia, de modo que el ser humano está muy acostumbrado a sufrirlas. Sin embargo, el año 2020 es distinto: vivimos en un mundo globalizado en el que cualquier pequeño suceso que ocurra en otro país puede afectar al nuestro de forma directa o indirecta. ¿Cómo ha afectado la COVID-19 a la economía doméstica? Quédate a leer. Aquí te lo explicamos con más detalle.

La economía familiar vive tiempos difíciles

Los efectos del virus han dañado la economía mundial en todos los aspectos. Desde finales de marzo de 2020, tras la paralización de la actividad productiva del país, la economía familiar se ha visto resentida por el cierre de negocios y el despido masivo de trabajadores. Muchas empresas han decidido bajar la persiana tras fuertes pérdidas económicas derivadas del descenso del consumo. Pese a que el Gobierno de España anunciara un paquete de medidas de carácter urgente, la realidad es que nos encontramos en un escenario desconocido y complejo.

¿Qué nos deparará en los próximos años? Nadie lo sabe. Lo que sí podemos predecir es que las relaciones internacionales y económicas van a cambiar. Uno de los mayores problemas que están sufriendo la mayoría de hogares es la falta de solvencia y liquidez. Tras el cierre de empresas, muchas familias se han quedado en una situación en la que varios de sus miembros engrosan las filas del paro.

La utilidad del préstamo en la economía doméstica

Además, las familias con hijos menores se han visto más perjudicadas aún. Conciliar la vida familiar con la laboral en tiempos de la COVID-19 no es tarea fácil aunque existan una gran batería de medidas económicas. Muchas de las familias han tenido que afrontar gastos que deberían haber suplido las instituciones competentes como el bono comedor, por ejemplo. Todo ello ha mermado la economía doméstica haciendo que muchos hogares se piensen en pedir préstamos.

Ante una emergencia sanitaria sin precedentes, muchos profesionales del sector bancario recomiendan planificar y reducir, en la medida de lo posible, gastos innecesarios. Pedir un crédito puede ayudar a la hora de obtener una mayor solvencia en tiempos difíciles.

Pedir préstamos durante la COVID-19

En el medio plazo nos encontramos en un escenario de máxima incertidumbre. Debido a la incerteza de la crisis, muchas familias están paralizando de forma drástica su consumo para aumentar sus niveles de ahorro. Durante los últimos meses, las instituciones financieras están facilitando el acceso al crédito debido a la actual alerta sanitaria.

A consecuencia del coronavirus, la unidad familiar ha sufrido una alternación muy profunda en la economía. Por esta razón, muchos hogares están recurriendo al préstamo para obtener liquidez de forma inmediata y suplir sus carencias más básicas. ¿Qué piensas al respecto?

Continuar (sin compromiso)