Tres formas de financiar la compra de un barco

Continuar (sin compromiso)
¿Sabes cómo funciona la compra de un barco? A no ser tengas algún tipo de relación con el sector náutico es muy difícil que hayas oído hablar de los productos financieros específicos, pero al igual que existen préstamos para pagar un coche o una vivienda a plazos, también hay créditos específicos para embarcaciones.

Maneras de financiar la compra de un barco

Según el tamaño de la embarcación que quieras comprar hay unos tipos de financiación más recomendables que otros. A continuación te hablamos de los tres más populares:

El préstamo personal

Se trata de un crédito similar al que solicitas cuando te vas a comprar un coche. Es el sistema más demandado y recomendado cuando quieres comprar embarcaciones por debajo de los 35 000 euros. Se trata de una fórmula ágil y que tiene menos costes asociados. Permite financiar el 100 % del barco y no necesita ser formalizado a través de un notario.

Como contraprestación, este tipo de deuda es la más cara. Aunque no depende de indicadores variables y, en consecuencia, el tipo de interés es fijo, al igual que ocurre con cualquier préstamo personal, su coste suele situarse varios puntos por encima de, por ejemplo, las hipotecas navales.

Hipoteca naval

Este tipo de deuda suele compensar cuando la embarcación cuesta por encima de los 35 000 euros. Para poder conseguir financiación, deberás disponer de una cantidad importante para la entrada, ya que no se suelen conceder créditos por encima del 75 % del valor de mercado.

Algo importante que afecta las características de las hipotecas náuticas es la naturaleza de los barcos. A diferencia de una vivienda, se devalúan más rápido y tienen mayores riesgos de sufrir siniestros. Por eso, aunque también utilizan el euríbor como indicador, su diferencial es más elevado y no suelen tener una duración superior a los 15 años

Leasing náutico

El leasing náutico es un arrendamiento financiero con opción a compra. La financiera compra la embarcación y te deja pagar cuotas hasta una fecha de vencimiento. A partir de esta tendrás que decidir si pagas el valor residual y te quedas el barco o no. Para que puedas solicitar este tipo de préstamo, la nave debe estar matriculada en la lista 7ª, de recreo y particular, o en la 6ª, de chárter, para usos profesionales.

Se suele aplicar el lesing náutico a barcos de más de 50 000 euros y te permiten, entre otras cosas, pagar el IVA aplazado o cambiar el título a un tercero antes del vencimiento. Aunque en España este método aún está en expansión, en países como Francia o Italia es muy popular.

Ahora que ya conoces los tipos de financiación para la compra de un barco, solo te queda elegir el modelo. Gracias a los distintos productos financieros, hacerlo tuyo es más fácil de lo que parece.

Continuar (sin compromiso)