En el mercado encontrarás muchos productos diseñados para este fin, así que es conveniente que conozcas las condiciones específicas de cada uno de ellos para que puedas elegir el que mejor se adapte a tus necesidades.
A la hora de tomar una decisión sobre qué préstamo para coches solicitar es conveniente que te fijes en tres criterios objetivos que son determinantes.
Por un lado, el tipo de interés nominal (TIN) que soportarán las cuotas que deberás abonar hasta completar su liquidación. Por otro, las comisiones impuestas por su apertura y cancelación anticipada.
Y no menos importante es que valores la vinculación exigida, es decir, si tienes la obligación de contratar otros productos financieros o servicios para poder optar a la oferta.
Normalmente, esta clase de créditos son bastante flexibles y pueden llegar a ofrecer cantidades que oscilen entre los 1000 y 75 000 euros, aproximadamente, dependiendo de cada caso particular. Asimismo, los plazos de amortización suelen establecerse también en función de cada cliente; y, generalmente, van desde los 12 meses hasta los 8 años.
Estos préstamos suelen financiar el 100 % del valor del vehículo, siempre y cuando este no supere la cantidad máxima de financiación que te ofrece la entidad. Conviene también que te fijes en si el contrato incluye o no una cláusula de reserva de dominio, que te impedirá vender o dar de baja tu coche hasta que no hayas terminado de pagarlo.
A la hora de calcular la financiación del coche para elegir el crédito que más te convenga, lo mejor es que recurras a un simulador de préstamo de coche. En Internet encontrarás varias de estas herramientas de uso gratuito, muy sencillas de utilizar.
Debes tener en cuenta que, en ciudades como Madrid o Barcelona, los coches antiguos están sometidos a varias restricciones de circulación. En la Ciudad Condal, por ejemplo, desde el pasado 1 de enero la nueva normativa de movilidad no permite a los vehículos más contaminantes el acceso al centro, considerado como Zona de Bajas Emisiones.
En Madrid, esta medida se extiende también a los fines de semana, por lo que, si no cuentas con la etiqueta de la DGT, no puedes circular por Madrid Central. Hay algunos casos en los que las restricciones impiden salir fuera.
Por eso, lo mejor pasa por renovar tu automóvil y solicitar el adhesivo para evitar sanciones. Y, para poder realizar esta operación, quizás recurrir a un préstamo de coche sea la alternativa idónea.